agosto 24, 2009

Pendejus Engrupidus

Sábado, pasada la una de la tarde, dopo la mia lezione d'italiano (ejem...). Iba caminando hacia el metro Baquedano por el Parque Balmaceda, cuando a lo lejos diviso a un grupo de pendex Sub 18 o Sub 20. Habitualmente la fauna adolescente que se ve por esos lados obedece más bien al perfil pokemón-emo-tribudemoda, pero éstos eran distintos: andaban con túnicas largas, negras, con detalles en rojo y amarillo, o en verde y gris. Tenían unas varas como de metro setenta o metro ochenta de alto, con un aro en la punta y por ahí se asomaba una pelota de fútbol... "Es broma", pensé, "¿Será?"... Efectivamente ¡Los lolitos estaban por iniciar un partido de quidditch!

Para los no iniciados en el mundo de Harry Potter, el quidditch es el deporte más popular entre los magos, la "pasión de multitudes" en las tierras del abracadabra. Y éstos chicos (ni tan chicos) se aprestaban a jugarlo, claro que con los pies tocando el suelo, y no a metros de altura, volando sobre escobas.

Me habría quedado ahí parada para mirarlos, pero me entró pudor porque de repente advertí que me miraban con cara de "¿Ella vendrá a jugar también"?. Obvio, justo ese día se me había ocurrido ponerme mi bufanda de Gryffindor (la "casa" a la que pertenece Harry Potter, algo así como una fraternidad de universidad gringa), y el rojo mezclado con el amarillo no pasa precisamente piola.

Así que apuré el paso pensando "Olvídenlo, pendejus engrupidus, tengo como diez años más que ustedes. Definitivamente yo no soy de los suyos". De hecho, mi entusiasmo por la saga y las pelis llegó sólo hasta la bufanda; no voy disfrazada a las avant premiéres, y con suerte recuerdo algunos de los términos del universo harrypotteriano.

¿Será que después de todo, fui muy fome cuando chica? Porque o sea, cuando estaba en el colegio me gustaba Sailor Moon pero no andaba de faldita y look marinero por la vida; también me gustaron los Caballeros del Zodíaco y nunca usé armadura. Reconozco que también me creí Cheetara y andaba echándole carreras a todo el mundo, pero jamás disfrazada.

Qué onda estos lolitos. Igual me caen mejor que los pokemones, porque por último leen libros de más de doscientas páginas y entre comillas, están haciendo deporte. Pero no sé... ¡Es que si no juegan con escobas voladoras, encuentro que no vale!

3 comentarios:

Anónimo dijo...

JUAJUAJUAJUAJUAJUA
es que ya no hay ideologías utópicas a las que adherir...hay que unirse a alguna weá!

Jonathan Martins dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Jonathan Martins dijo...

Aqui estan las reglas para ese deporte (?).
http://thefuntimesguide.com/2006/06/harrypottergame.php

Veamos el lado positivo, el dia que éste llegue a ser deporte olímpico tendremos varios representantes... claro, tambien habrá competidores en el Lanzamiento del Tazo, Magic con relevos y Juegos de Rol por equipos.
Cómo no vamos a sacar una medalla!!